Colaboración: Paola Ippolito.- Juan Pablo Geretto tiene esa calidez que portan los artistas humildes en su talento. En una amena charla pudimos dialogar abiertamente de todo, y se plasmó en un ida y vuelta enriquecedor. La primera vez de “Maestra Normal” en la costa, “con muchas expectativas y desconociendo el movimiento, pero confiando en el público”. Él vive en Buenos Aires y debe añorar las sensaciones de su Gálvez natal, se formó en Rosario, siempre recuerda sus maestros, sus pares, su aprendizaje en función de la experiencia. En Gálvez, el pueblo de su infancia, empezó a actuar teniendo solo ocho años, y estos 20 años de trayectoria le trajeron “diversión, esfuerzo, un transitar. No me obsesiono con objetivos concretos, las metas surgen del día a día y de cómo fluye la vida” afirma con una convicción contagiosa. Los premios no lo cambian, con total naturalidad afirma: “si vienen, mejor, te ven más, te eligen, pero hay que seguir trabajando.” -El arte, ¿es liberador? -Algunas veces sí; otras no tanto. Cuando se hace por el arte en sí mismo sí, cuando ya incorporás trabajo se aleja de ser liberador; hay mucha burocracia, mucho lobby también. Juan Pablo evoca y trasciende una figura como la maestra que para todos tiene un punto de inflexión, desde un vínculo protector, conciliador, de límites o de rigor, pero nada queda indiferente y se encarga de pasmar esa emoción en cada línea -¿Qué te dejó la construcción de Reina, el personaje de TV con el cual llegó más popularidad aún? -Fue divertido, era un desafío componerlo en un prime time y la popularidad de la TV no es comparable, genera un mayor acercamiento del público. Hablamos de trabajo y de espacio, cuando quise saber su lugar en el mundo, Juan Pablo me dio dos planes: “mi casa y Bali” recordando un viaje reciente. Los referentes son pilares, son faros y en su caso el recuerdo constante de dos personas, “Chiqui González y Ale Ciurlanti, amigas, personas de quien admiro su forma de pensar y su forma de plasmar ese pensamiento en la realidad” En cuanto a la obra, nos deja la sonrisa permanente, un sabor a nostalgia y la entrañable composición de cada perfil para identificarse, emotivo, autoritario, risueño, sensible. Todos recordamos, recreamos y comprendemos mejor a nuestras maestras; es un antes y un después de la obra. Esta obra es emoción en estado puro, nostalgia y risas en un balance exquisito, la fluidez de su entrega es sorprendente Se me ocurre trasladar algo de actualidad a la entrevista y dejo la pregunta en el aire: “¿somos víctimas del sistema educativo en algún punto? - Claro que sí, aún más, podemos después de los 30 años comprender mejor a esos referentes, pero el contexto social y educativo cambió en todos estos años. - ¿Cómo ves el teatro en nuestro país? - Prolífico, se genera un vínculo sorprendente con el público y la oferta de espectáculos es tan amplia que uno puede nutrirse de obras permanentemente - Si pudieras hacer algún cambio, utópicamente, ¿cuál sería? - Las salas, tal vez salas circulares, donde la proximidad con el público fluyera más naturalmente. Cerramos la nota con pendientes y futuros, tomados al azar como de un damero y así surgieron las ganas de “viajar más por placer, no tanto por trabajo” y “abocar todo mi tiempo a la gira durante este año” Agenda Sábado: Teatro Luz y Fuerza San Bernardo 22 hs Domingo: Teatro Sociedad Italiana de Maipú a las 18 hs