Pinamar (por Sergio Michnowicz).- Fue un caso aislado, pero es bueno que se sepa. A raíz de la aparición de un felino con síntomas de rabia, durante los primeros días de enero se dispuso un amplio operativo puerta a puerta en un sector de Valeria del Mar, donde donde fue detectado el caso.
La Ing. Evelina Sangorrin a cargo del área municipal de Zoonosis explicó que "recibimos el alerta de un comportamiento anormal de una gata, cuya propietaria es una profesional veterinaria de manera que ese animal estuvo siempre en observación. Nos alerta, nosotros enviamos la muestra para que la analice Zoonosis Urbana, en principio dio negativo pero después positivo respecto al virus de la rabia."
"Mas que nada queremos difundir esta información para hacer hincapié en todo lo que son medidas preventivas tanto los felinos como los caninos como los murciélagos son reservorios del virus. Y es muy probable que varias veces de positivo respecto a este virus."
Por tal motivo "venimos haciendo un trabajo desde el departamento de Zoonosis enviando muestras cuando se encuentran murciélagos de día o muertos, y en la totalidad de esas muestras han dado negativo. En este caso en particular hicimos lo que dice el Protocolo del Ministerio de Salud de la Nación donde lo que hacemos es controlar el foco vacunando puerta a puerta a cinco cuadras del radio del lugar donde habitaba este animal. Y eso se logró, terminando el martes pasado. Recuerdo que tanto los gatos como los perros se deben vacunar una vez al año, por eso deben acercarse al Centro de Salud Animal o al móvil de castraciones. Además que los viernes también realizamos campañas de vacunación."
A su turno el médico veterinario Martín Fernández dijo que "una medida preventiva es que, a partir de los tres meses de edad, se vacuna a los cachorros y después una vez al año tanto los gatos como los perros. Otra medida es que si vemos que nuestra mascota está actuando extraño, tienen que llamar al veterinario de confianza o bien llevarlo al área de Salud Animal."
"Hay dos ciclos: uno aéreo y otro terrestre. Y en este caso parece ser que fue de un ciclo aéreo que mordió al gato y se contagió. Es importante que toda persona mordida llene una planilla en el hospital para hacer el control antirrábico posterior a ese animal durante 10 días. Y el médico actuante, según el tipo de lesión y laceración o escoración, efectuará un tratamiento adecuando."
"Hay que aclarar que el estudio del caso todavía no terminó" sostuvo la Ing. Sangorrin. "Hay cosas por determinar, porque podemos estimar lo que pudo haber sucedido pero no sabemos a ciencia cierta lo que pudo ocurrir. Todo lo que son vías de comunicaciones protocolares se hicieron en forma inmediata; nosotros activamos todos los alertas, primero los de salud local como el hospital comunitario y los centros de salud, tanto para el control humano como el animal. También se avisó al Ministerio de Salud de la Nación y obviamente todo lo que es protocolo lo seguimos en tanto información que nos bajan."
"En cuanto a la comunicación local, también se alertó al Colegio de Veterinarios; se hizo una reunión con todos los profesionales que son quienes pueden dar seguimiento. Toda esa información fue difundida en su debido momento a medida que nos íbamos enterando de la situación."
Por su parte el médico veterinario Daniel Isidro, presidente del Distrito 13 del Colegio de Veterinarios de la Provincia de Bs.As. sostuvo que "hay que tener el plan sanitario en fecha, tanto de felinos como caninos, una vacuna por año. Que si bien habitualmente a los 9 meses cesa, la legislación sostiene que una vez por año el animal está cubierto."
"En tanto que todos los colegas de Pinamar y la zona nos pusimos en sintonía para tratar de solucionar el problema y que no avance. Desde mi consultorio comencé a avisar a todos los dueños de gatos que me informen. También Zoonosis está haciendo eso, porque en realidad el gato es muy complicado para llevarlo a los consultorios o no son fáciles de agarrar. Lo más conveniente es que avisen."
"Hay que hacer vacunaciones lo más masivas posibles para que en 30 días al menos tener casi toda la población tanto felina como canina vacunada."
El médico veterinario José Domenech agregó que "el virus de la rabia se divide en variantes. En los años '70 cuando teníamos el mayor problema en la calle con rabia, existía la perrera. La variante 1 es aquella que tiene como reservorio natural a perros y gatos y por eso la perrera cumplía esa función. Cuando se controló esa variante de virus la perrera dejó de funcionar y ahora lo que se realiza es castración para controlar la población canina."
"La variante 4 es endémica en la Argentina; está siempre presente. Y en nuestra zona principalmente en los murciélagos insectívoros. No se alimentan de sangre, tienen actividad nocturna. Por eso si vemos uno de día, no es normal; o bien si no puede volar siendo de noche. Lo que puede significar que el virus le está afectando el sistema nervioso. Por eso es importante tomar recaudos: que no se acerquen nuestras mascotas, ni tampoco nosotros exponernos a que el murciélago nos muerda cuando está en el piso. Nos avisan, lo recolectamos y lo enviamos al centro de referencia como muchos veces hicimos para que se analice."
Para más información llamar al (02254) 49.1669.