Carlos Ibarra es un técnico informático de renombre en Pinamar, que ha crecido en función de dos elementos: credibilidad y compromiso con la labor que despliega en la informática.
Carlos no cree que las nuevas tecnologías o el hecho de indagar en ellas dependan de una franja etaria determinada sino más bien se relaciona con la mentalidad. Como bien dice, “le he arreglado las computadoras a todos” para luego volcarse al marketing desde hace unos años ya que se encontró con esta alternativa “sin darse cuenta”.
“Justamente ahí estaba viendo un curso mío en el whatsapp business que es lo que me inició en todo esto. Arreglando mis computadoras me daba cuenta que la pasaba mejor comunicándome con mis clientes a través de esta aplicación que reparando sus propios equipos. Hoy en día me dedico íntegramente a eso, soy un especialista y entiendo que todo el mundo puede hacerlo por eso se comparte. Tenemos una gran diferencia entre el antes y el hoy tecnológicamente es que muchos de los que nos dedicamos a esto entendemos que tenemos que compartir nuestros conocimientos que es la manera de crecer”, asegura a modo introductorio.
La idea es que aprendan a utilizar una aplicación para que con sus teléfonos puedan comunicarse con sus clientes. Whatsapp business es la versión de whatsapp para mi voz y cualquiera que sea emprendedor, que esté en el mundo de los negocios. Yo en febrero me comunicaron que hay 2000 millones que usan la plataforma así que mirá si se puede o no hacer negocios.
“A veces el negocio es para un maestro poder contactar con un alumno, poder tener una charla por esa vía, porque les resulta mucho más cómodo tener acceso por esta aplicación que es solamente una pestaña de lo que se puede hacer hoy en día con la tecnología”, elogia Carlos a whatsapp y agrega la practicidad que tiene la agenda de esta aplicación. El técnico entiende que la tecnología, hoy, va para el lado de los móviles, de los teléfonos celulares y la automatización.
Ante el avance de la tecnología y lo que para muchos puede constituirse en una realidad inexplicable, Ibarra dice “no hay que ir más en contra de esto, sino que hay que sumarse”.
“Hasta el año pasado, los números decían que si uno no se sumaba a las redes digitales estaba perdiendo un 40 % de posibilidades de venta. Si uno es una persona que tuvo negocio, que puede considerarse como que la edad es un impedimento, una vez que se le encuentra la vuelta nota todo ese conocimiento adquirido, que todas esas historias que uno tiene dentro se pueden digitalizar esto es imparable. Hay que animarse”, recalca.