ME AUTORIZA A DAR UNOS PALOS...?: Las cosas entre ellos no anduvieron bien y él se fué del rancho, pero parece que con ganas de volver... El tiempo pasó pero él no se daba por vencido, y cuando terminaba el día de trabajo volvía a la "querencia" para ver si en una de esas...Pero la insistencia se convirtió en más que una molestia, era ya una amenaza, y la señora acudió al Teniente Alcalde de su Cuartel Don Benjamín Gonzalez, en la antigua "La Limpia" (o lo que es conocido hoy como "La Providencia"). El Teniente fué directo al grano, y elevó el informe de lo que acontecía al Sr. Juez de Paz Don Florentino Gomez: "...Pide U. qe. le haga el bien proibirle el qe. llegue a su casa o de no qe. le dé una ceguridad bien a ella o ha mí para qe. llo pueda poner acudir en cualquier cosa qe´el quisiera hacer en su casa hadesoras de la noche para qe. yo pueda autorizar al qe. ce halle allí para qe. lo despida por bien o de no a palos es cuanto le hace saver U. esta Señora y pide U. la mire con toda caridad. Dios guarde U. muchos años." Firmado Benjamín Gonzalez. Fué el 29 de Diciembre de 1853, cuando se solicitó al Juez, lo que se podría denominar como la primera medida cautelar de protección de persona y prohibición de acercamiento a la señora, o por lo menos que se encuentre documentada (la misma se encuentra archivada en el Juzgado de Paz Letrado de Gral. Madariaga). En el antiguo Tuyú, se autorizaba a "despedir" a los palos si era necesario...!!!