En una decisión que causará sorpresa y conmoción en los vecinos, el Fiscal Walter Eber Mercuri, a través de la DDI local, notificó ayer por la tarde a Luciana Rosa, que deberá presentarse el próximo viernes por la mañana en la Fiscalía, a prestar declaración indagatoria, por estar imputada del delito de homicidio agravado por el vínculo, en perjuicio de su pareja, el vecino José Azpirolea. A casi 3 meses del asesinato, en dialogo con EL MENSAJERO, el propio Fiscal de Madariaga, Walter Mercuri, fundamentó esta diligencia diciendo que “En el día de hoy – por ayer-, se dispuso el procesamiento (se la cita a indagatoria), a Luciana Rosa, concubina de la víctima, en carácter de autora del homicidio de José Azpirolea. Se llega a esta imputación, debido a que de la investigación surge que el robo al que hizo alusión ella al momento de hacer la denuncia y en las diferentes declaraciones, no es tal. A partir de las contradicciones en las que incurrió la imputada y de las diferentes pruebas que se fueron colectando, la fiscalía llegó a la conclusión que no se trató de un robo, sino de un homicidio. En definitiva, para la fiscalía el robo está totalmente descartado, y hay motivos para sospechar que la concubina sería la autora del hecho. Lo que sí, al no haber prestado declaración indagatoria, no se pueden detallar las pruebas por las cuales se llega a esta conclusión, pues primero las tiene que saber ella”. Al ser consultado sobre el porque ante un delito tan grave la imputada no fue detenida, respondió que “Se pide la detención, pero la resolución que firmó el Juez Gasquet, la fundamentó y llegó a la conclusión que no existen peligros procesales de fuga o entorpecimiento de la investigación, por lo cual no determinó por ahora su detención, sin perjuicio que ello se pueda llevar a cabo en un futuro”. En cuanto a la continuidad de la investigación, Mercuri sostuvo que “la investigación continua, pues todavía restan producirse otras pruebas que pueden esclarecer aún más el hecho”. Recordemos que el pasado 3 de mayo del corriente, el vecino José Azpirolea fue ultimado con un disparo calibre 22, cuando se encontraba descansando en su vivienda de la calle 8 entre 7 y 9 del barrio San Martín de esta ciudad. En aquel momento se sospechaba que el móvil había sido el robo, aunque esto, de acuerdo a los datos de los investigadores, se modificó a medida que fueron colectando distintas pruebas y hoy para ellos está totalmente descartado.