La mañana del domingo en General Madariaga tuvo un desenlace violento cuando un automóvil embistió un comercio y derribó la señalización lumínica de una esquina céntrica. El accidente, atribuido a un conductor en evidente estado de ebriedad, ocurrió en la intersección de Martinez Guerrero y Echeverría.
Según se supo, el conductor de un Peugeot 208 gris perdió el dominio del vehículo, se desvió de la calzada y se proyectó contra la fachada de la fiambrería 'Tres Estrellas'. El choque fue de tal intensidad que también arrancó de su base el semáforo ubicado en la esquina, provocando daños estructurales considerables en el local comercial.
El resultado del test de alcoholemia realizado al conductor fue contundente: 2.25 gramos de alcohol por litro de sangre, una cifra que quintuplica el límite máximo permitido por la ley. Aunque el hombre no sufrió heridas de gravedad, su vehículo fue inmediatamente secuestrado y trasladado al depósito municipal.
Las autoridades procedieron a labrar las actuaciones correspondientes mientras se evalúan los daños totales ocasionados por este episodio que pudo haber terminado en tragedia.