(Gentileza El Pionero).- En las primeras horas del pasado 9 de Julio se produjo un vuelco cuando un vehículo circulaba por la Avenida del Mar.
En el siniestro pereció una joven pinamarense, Tiziana Alcalá, a quien acompañaban a bordo del automóvil otros cinco jóvenes. Uno de ellos, gravemente herido perdió la vida horas más tarde, acentuando el dolor de otra familia y el tono de la lamentable tragedia por las circunstancias que rodean al hecho.
El pasado domingo 9 de agosto, al cumplirse un mes de la tragedia, para Daniel Alcalá, el padre de Tiziana, la herida abierta por la pérdida se verá agravada por la incertidumbre y la falta de respuestas. Hoy uno de sus propósitos es que se haga justicia y que haya transparencia.
A lo largo de la entrevista, Daniel no utiliza la palabra accidente, es que tiene el pleno convencimiento que se trata de un homicidio culposo tal cual reza la causa.
“Yo veo todo muy desprolijo, yo creo que ese auto si le tengo que realizar una pericia no puede estar a la intemperie”, señala entre otras anomalías, como el estado de las alfombras que no se encontraban en la misma posición que en el momento del siniestro, por algún motivo que desconoce.
Desde un principio, más allá del dolor de padre, quiso la verdad a fondo y lejos de rehuir lo cruento de una autopsia exigió su realización. Hoy Daniel busca respuestas, desde la Justicia el castigo, de corresponder, hacia quien manejaba el auto y por otro, el resarcimiento que estipula la ley, ni más ni menos.
Alcalá está conforme con la atención del personal del hospital, pero no se olvida del desdén con que lo atendiera el secretario de Salud, Eduardo D’Agostino no obstante el conocimiento previo. Si bien tuvo una llamada del intendente Yeza, el acercamiento no fue más allá de eso, no se materializó una ayuda concreta.
Daniel o su entorno han sufrido amenazas anónimas que fueron denunciadas, siempre ha notado cierta reticencia en proporcionarle información, y hoy todavía no tiene una respuesta en cuanto a las responsabilidades ni un acabado informe técnico que diga esto ocurrió por impericia de quien iba al volante, o se debe a una falla técnica.
Sea lo que sea, quiere llegar al fondo de la cuestión por eso se siente exasperado por la demora, la lentitud y la falta de un resultado. Es más, recuerda que no se enteró de los hechos por las vías correspondientes y no deja de estar desilusionado de quienes más esperaba, y agradecido de quienes apenas conoce y le estiraron su mano dando ayuda.
Alcalá tiene fotos sacadas a las pocas horas del siniestro al que denomina homicidio. Tiene muchas dudas, en algunos casos no entiende como se gestionó el registro del conductor, y de ser de reciente emisión, por qué no portaba el rótulo de principiante.
Por último, asegura que no está satisfecho con el proceso, y canaliza su dolor a través del deseo de que se haga justicia.